Carta al pequeño 2011

Pequeño 2011:
Llegas inocente, no sabes cuánta cosa terrible le tocó a tu hermano 2010, el pobre ya se tenía que detener el corazón con la mano, porque andaba en sus finales roto. Descansará en paz luego de tanto sobresalto.
Los dones que traes en tus alforjas compártelos con gente buena, que abunda; no los apuestes en la calle ni los cambies por dólares de la mafia.
Abraza a los niños, protege a los ancianos; que se vaya en tu año el menos número posible de personas.
A los políticos bríncalos, ellos buscarán en tu tiempo hacer campaña electoral, serán cantos de sirena, que no te seduzcan si no son genuinos sus proyectos de reivindicación social.
Enfila tus cañones, desde el primer lunes, a esa comisión de obstáculos que nos acecha con tanta frecuencia, entorpeciendo las ganas de hacer.
Representas el tiempo, pequeño 2011, así que destaca la fuerza del presente, abrillanta el ánimo y la esperanza de que otro mundo es posible.
Moja las balas, a modo de travesura, para que ningún arma se dispare en contra de ser humano alguno.
Crecerás con los meses, no te pierdas la magia del instante ni la sonrisa por lo simple.
Acorázate con dignidad y fortaleza, que queremos vernos y verte en tu final entero.
Abrazos y besos.